Mi vida no cambió porque me senté a esperar
Porque sólo me dediqué a observar sin aportar
Mi vida no mejoró cuando decidí quejarme del mundo
Viendo cada “imperfección” que pueda existir en él
Mi vida no floreció cuando sabía que mis actitudes no eran buenas
y aún así las seguí repitiendo sin importar a quien yo hiriera